Gemma Martí
De pequeña tenía muy poca autoestima y mostraba mis máscaras con el objetivo de ser querida.
Me sentía inexistente y
con un apego evitativo que me hacía tomar distancia en las relaciones y no profundizar. Ya que para mí amor era igual a dolor.
Con el tiempo fuí conectando con el amor hacía mi esencia.
Y cuando conecto con ese amor hacia mí, puedo amar al otro, desde la libertad de escoger lo mejor para mi vida.